Veo "Okja", la película surcoreana de Netflix injustamente abucheada en Cannes y duramente criticada por ser una película realizada por y para un servicio de streaming y estar entre las nominadas a la Palma de Oro de dicho festival. Con un inteligente guión (una multinacional encarga a diferentes granjeros la cría de un cerdo experimental a fin de participar en un concurso que elegirá -al cabo de 10 años- al mejor ejemplar), un extraordinario elenco para la interpretación de los histriónicos personajes (Tilda Swinton, Paul Dano, Giancarlo Esposito y Jake Gyllenhaal), una lograda actuación de la niña Seo-Hyun Ahn (quien durante su aventura de madurez descubrirá crudas lacras como son la experimentación con los alimentos modificados genéticamente, el ecoterrorismo o la obsesión del ser humano por la imagen y las marcas), una bella fotografía, imágenes de una gran perfección visual, unos correctos efectos especiales que humanizan al animal, una excelente dirección (Bong Joon-ho ha dicho que tuvo que visitar un matadero real y pudo entender el dolor de los animales al formar parte de una cadena de producción ajena a ellos) y el toque justo de humor negro e ironía, he disfrutado de un film reflexivo acerca de lo que consumimos y lo que está detrás de los sistemas de producción. De 6,8.